La jornada de Liga El partido de San Sebastián
Di María y Ronaldo salvan a un Madrid gris en Anoeta
1->La Real puso el fútbol y fue superior a los blancos durante muchos minutos
Domingo, 19 de septiembre del 2010
TITO IRAZUSTA / San Sebastián
La primera victoria del Madrid fuera de casa llegó después de un pobre encuentro. Al esquipo blanco le valieron dos chispazos para sacar adelante un encuentro en el que Casillas encajó el primer tanto de la temporada y su defensa tuvo mucho trabajo. La Real puso el fútbol y mereció más, pero el Madrid sacó adelante el choque con más oportunismo que juego (1-2). Mourinho, que sufrió dos salivazos al bajar del autocar, se mostró muy molesto con sus jugadores.
Diego Rivas, anoche en Anoeta. REUTERS /
FÉlix OrdÓÑez
Anoeta se le atragantó al Madrid en la segunda
salida del equipo blanco en Liga. Después de un
primer cuarto de hora en el que el equipo de Mourinho dio la impresión de ejercer una cierta autoridad, Casillas comenzó a sufrir.
Todo el trabajo que no había tenido en los primeros encuentros,
tanto de Liga como el de Champions,
comenzó a acumulársele ayer. Bastó que la Real se quitara de encima los complejos para poner cerco a la meta rival.
Lo hizo después de que el Madrid comenzara a
diluirse en el centro del campo y pagara sus desajustes con llegadas muy claras del conjunto vasco, sobre todo por la banda derecha. Ahí, Xabi Prieto le dio la noche a Marcelo. A su lado, Tamudo descargaba a ambos costados para hacer sufrir a la
zaga madridista.
A los seis minutos llegó el primer aviso con un centro de Prieto y cabezazo de Griezmann que salió alto. Después de un par de remates inocentes de Ronaldo y Xabi Alonso,
el equipo de Martín Lasarte se quitó cualquier miedo y comenzó a poner al Madrid contra las cuerdas. Griezmann recibió un pase de Tamudo,
pero el francés lanzó el balón fuera solo ante Casillas (m. 25).
UN EQUIPO PARTIDO / Enfrente, el Madrid había desaparecido. Era un equipo partido, con una gran distancia entre líneas.
Xabi Alonso se veía obligado a atender más a la faceta defensiva que a la creativa.
Mientras, Casillas recuperaba la ansiedad y cargaba contra sus jugadores, con especial atención a Ronaldo, que no quiso saber nada de echar una manita a sus compañeros a la hora de
presionar.
No fue el único jugador que se desentendía del partido. Özil apenas apareció. Khedira, tampoco. Y de Higuaín y Ronaldo apenas había noticias.
Todo el trabajo del equipo de Mourinho se fue concretando en la faceta defensiva.
Marcelo salvó un gol cantando al adelantarse a Tamudo tras un centro
de Prieto (m.31).
La bronca de Mourinho en el descanso despertó a los jugadores y, antes de que la cosa fuera a mayores, Di María arregló la situación con una jugada personal por la izquierda. El argentino recortó a un defensa y marcó con la derecha (m. 51).
Un gol que reanimaba a un Madrid muy gris y al que su renta tan solo le duró nueve minutos. Una falta lanzada por un excelente Griezmann desde la izquierda la remató Tamudo a un metro de Casillas en un error de la zaga blanca (m. 62).
El tanto hacía justicia al trabajo de La Real y a la palidez del Madrid, pero apareció Ronaldo para quitarse la ansiedad y marcar el segundo tanto al lanzar una falta que dio en la espalda de Pepe, en la barrera, y se coló en la portería de Bravo (m. 75). Sólo entonces respiró Mourinho tras ver una pésima entrega de su equipo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario